¿Cómo hacer la declaración de la renta de un piso en alquiler del que eres propietario?

Como propietario, ¿no sabes si estás obligado a hacer este trámite? ¿Tienes dudas sobre qué impuestos debes pagar y qué deducciones puedes obtener tras la declaración de la renta de tu piso en alquiler? Sigue leyendo porque te contamos todo lo que debes saber sobre esta gestión.

¿Cuándo estoy obligado a declarar un alquiler?

Todos los propietarios con una vivienda en alquiler que obtengan beneficios anuales superiores a los 1.600 euros están obligados a declarar las mensualidades recibidas como rendimientos de capital inmobiliario, según lo que establece la Agencia Tributaria. ¿Qué ocurre entonces si no se declara la renta de un piso en alquiler? En caso de no hacerlo, se aplicarán grandes sanciones y multas con intereses de demora.

Es importante saber que no declarar la renta de un piso en alquiler puede conllevar serias consecuencias a los propietarios. De hecho, teniendo en cuenta que 4 de cada 10 alquileres no se declaran, según datos del Ministerio de Hacienda, los controles para prevenir la evasión de impuestos se han incrementado. Tanto es así, que los alquileres en negro están en el punto de mira, analizándose cuentas bancarias e, incluso, los contratos de consumo energético, entre otras medidas de vigilancia. 

¿Cómo declarar el alquiler de un piso en el IRPF 2022? 

El primer paso es identificar tu vivienda alquilada en la hoja del IRPF, en el apartado de rendimiento de capital inmobiliario, dentro de la declaración de la renta. A partir de ahí, indicarás los importes que has recibido por arrendar tu propiedad:

• Ingresos íntegros: rentas del coste de alquilerpercibidas, sin restar ningún gasto. 
• Importes sobre bienes cedidos: cantidades referentes a los enseres que incluye el alquiler del piso, como los muebles, por ejemplo. 
• Repercusiones: cualquier tipo de ingreso que siendo propietario has proporcionado al inquilino para cubrir obras, servicios, impuestos, etc. 

No te preocupes, al declarar la renta del piso que tienes alquilado no deberás pagar el 100% de los ingresos percibidos que acabamos de mencionar. A estos, tendrás que restar los gastos deducibles, que vemos a continuación. 

¿Qué se puede desgravar el propietario en la declaración de la renta de un piso en alquiler?

A diferencia de lo que se tiende a pensar, declarar la renta de alquiler de tu piso en propiedad no te implicará una pérdida económica. Más bien, todo lo contrario, ya que obtendrás beneficios en forma de ahorro fiscal. Y es que, como te decíamos, sobre los ingresos recibidos te podrás restar una buena suma de gastos:  

Intereses y gastos de hipoteca

En la casilla 0104, te puedes desgravar gastos asociados a la hipoteca (no el préstamo en sí), como los intereses de amortización. 

Gastos de conservación y reparación

Sobre la deducción de los gastos de reparación y conservación, que anotarás en la casilla 0107 del IRPF, debes tener en cuenta que en la declaración de la renta del alquiler de un piso no se incluyen los gastos relacionados con la ampliación o la mejora de los bienes. Es decir, los gastos de reparaciones y mantenimiento (pintura, fontanería, calefacción…) que te puedes desgravar deben ser sobre arreglos similares a los elementos anteriores, no son válidas reformas mejores. Por ejemplo, si cambias las ventanas de una habitación, las sustitutivas deberán ser del mismo modelo o uno muy parecido, no vale la innovación. Sin embargo, sí que podrás pedir ayudas, como Fondos Next Generation, otorgados por la Unión Europea para rehabilitar tu piso. 

Impuestos y tasas 

Los impuestos y tasas de un piso en alquiler se pueden desgravar de la declaración de la renta del alquiler de tu piso, si los pagas tú como propietario. Engloban el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), las tasas de basura, de alumbrado, etc., y deberás hacerlos constar en la casilla 0015. 

Saldos de dudoso cobro 

Los impagos de los inquilinos también se pueden deducir en la declaración de la renta de un piso en alquiler, en la casilla 0116, siempre y cuando el deudor esté en concurso (sea insolvente) o haya transcurrido un tiempo superior a seis meses del intento de cobro. 

Gastos de comunidad 

Los gastos relacionados con las cuotas de comunidad, administración del edificio, servicios de vigilancia, portería, jardinería, entre otros, así como las derramas, se podrán restar en la declaración de la renta en el alquiler de un piso rellenando la casilla 0109. 

Seguros del hogar

Son los gastos derivados del seguro del hogar o de alquiler, y estos se reflejarán en la sección de otros gastos fiscalmente deducibles en la declaración de la renta del alquiler de tu piso. 

Amortización del inmueble y sus bienes muebles

En cuanto a la amortización de la vivienda, es decir, esos gastos derivados de la pérdida de valor del inmueble, en la declaración de la renta de tu piso en alquiler te puedes deducir: 

• Gastos de amortización del inmueble: puedes restar el 3% del coste de adquisición de la vivienda satisfecho o del valor catastral (sin incluir el suelo). La casilla donde debe reflejarse es la 0118. 
• Gastos de amortización de bienes inmuebles: son las cantidades invertidas en mobiliario, electrodomésticos y objetos de la casa alquilada. Puedes descontar un 10% de su valor en la casilla 0117 de la declaración. 

Suministros

Si como propietario pagas los gastos de la luz, gas, agua, Internet, etc., también te los podrás restar en la casilla 0113 de la declaración de la renta de tu piso alquilado.

Entonces, ¿qué impuestos hay que pagar a Hacienda por el alquiler de una propiedad? 

Hasta aquí hemos visto que siendo propietario obtienes unos ingresos por alquilar tu piso, pero a estos debes restarle los gastos deducibles mencionados. Y, además, sobre la cantidad resultante podrás realizar una reducción del 60%, cuyo resultado estará reflejado en la base imponible general, donde constan también otros de tus ingresos (como el salario, por ejemplo) siempre que no sean inversiones. Por tanto, los impuestos que pagues de la renta por alquilar tu piso también dependerán del total de tus ingresos. 

Pongamos un ejemplo:

Si tienes unos ingresos totales de 14.000 euros y tienes unos gastos deducibles totales de 3.500 euros, restando estos, el resultado de tu beneficio será de 10.500 euros. A esta cantidad le aplicarás la reducción del 60% dando un total de 4.200 euros a tributar en Hacienda por el alquiler tu piso. 

Cabe señalar que dicha reducción del 60% solo se hará efectiva en la declaración de la renta de un piso en alquiler destinado al uso de vivienda habitual. No se aplicará en otros tipos de contratos de arrendamiento, como el alquiler temporal o vacacional. De ahí la importancia de contar con el asesoramiento de profesionales, para conocer con detalle las condiciones de este tipo de gestiones.

En definitiva, hacer la declaración de la renta de un piso en alquiler es obligatorio si eres propietario y no hacerlo supone graves sanciones. Sobre los ingresos totales recibidos, existe la posibilidad de deducirse varios gastos, además de poder incluir una reducción del 60% sobre los mismos en el IRPF (recuerda, siempre que sea un alquiler como vivienda habitual) lo cual se traduce a un importante beneficio fiscal para tu bolsillo. 

La declaración del alquiler de tu piso en la renta 2022 es un trámite muy importante y que no hay que tomarse a la ligera. Por eso, el mejor consejo que te podemos dar es confiar en profesionales inmobiliarios que te ayuden con la gestión del alquiler y de tus inquilinos para liberarte de la carga mental que implican estos procesos.  

Si aún te quedan dudas sobre cómo meter el alquiler en la declaración de la renta 2022, en Masteos estaremos encantados de ayudarte con este trámite. Además, somos expertos en asesorar a nuestros clientes en materia de inversión en vivienda y rentabilidad inmobiliaria. ¡Contáctanos y te asesoramos!

Y tú, ¿ya tienes claro cómo hacer la declaración de la renta de tu piso en alquiler?